viernes, 23 de octubre de 2009

BROTES VERDES

Estimados lectores,
Cúan frecuentemente en la ultra-civilizada y mega-moderna Europa Occidental nos jactamos de eso, de ultra-civilizados y mega-modernos.
Pues resulta que en ciertos países cuasi-tercermundistas en lo económico (a veces, sin el cuasi), el sistema político parece ser más limpio que, sin ir más lejos, en nuestro querido Reino de España. Ya pudimos ver en Honduras que la independencia del poder judicial, comandando la deposición del primo hermano del orangután del Orinoco, tiene un grado de pureza mucho más elevado que en España, donde el poder político contempla y contribuye activamente al desmembramiento de España, de la España constitucional, maniatando al poder judicial, y al poder militar (no nos olvidemos de él ni del artículo 8 de la Constitución).
Fíjense por favor en la última frase del artículo, porque tiene más importancia de la que parece: "En un sentido esta sentencia concuerda con otras sentencias similares en Ecuador, Argentina y recientemente en Chile”. Eso, señores míos, se llama forjar unos valores comunes, sólidos, una identidad propia asentada en los verdaderos derechos de las personas. Eso, señores míos, se llama, hacer América.
¿Siguen pensando que Hispanoamérica es tan subdesarrollada? Pues resulta que el alumno está superando con creces al maestro. Para meditar....

Fuente: http://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=4571
Ordena al Ministerio de Salud que no la distribuya

El Tribunal Constitucional del Perú prohibe la píldora post-coital por ser potencialmente abortiva

El Tribunal Constitucional del Perú invalidó la distribución de la denominada «píldora del día siguiente» en los centros de salud pública y ordenó al Ministerio de Salud que se abstenga de desarrollar esta política, porque no se ha descartado el potencial efecto abortivo del polémico fármaco. Según informó la Oficina de Imagen Institucional del TC, los magistrados consideran «que no se ha demostrado la inexistencia del efecto abortivo, la inhibición de la implantación del óvulo fecundado en el endometrio».

Publicado el 2009-10-23 10:40:00

(ACI/InfoCatólica) De esta manera, el TC declaró fundado el recurso de amparo presentado en la ONG Sin Componenda “luego de evaluar los argumentos presentados por importantes instituciones nacionales e internacionales” sin que se haya podido desvirtuar que “el derecho a la vida del concebido pueda ser gravemente menoscabado por el uso del indicado fármaco, de acuerdo con el artículo 2.1. de la Constitución vigente”.

“En esa lógica, la sentencia ordena que los laboratorios que comercializan la ‘píldora del día siguiente’ incluyan en la posología una advertencia destinada a que los consumidores tengan conocimiento suficiente de que el producto podría tener un efecto abortivo”, agrega la nota de prensa.

Según Carlos Polo, director de la Oficina para América Latina del Population Research Institute (PRI), el TC “ha actuado correctamente porque planteó las cosas en su justa medida. Los promotores y los que venden la píldora tenían que demostrar que el efecto antimplantatorio no existía y no pudieron hacerlo." PRI es una de las organizaciones citadas en la sentencia del TC.

“La sentencia reproduce los textos completos de la literatura que acompaña al producto en diversos países donde se acepta el efecto antimplantatorio. Cita a la Food and Drug Administration de Estados Unidos (FDA) que es el referente mundial en farmacología. Esta simple constatación es lo que nunca quisieron ver los últimos Ministros de Salud - desde Pilar Mazzetti- por obvios motivos ideológicos y en beneficio del laboratorio farmacéutico dueño de la marca Postinor” con el que se comercializa la sustancia levonorgestrel.

“En un sentido esta sentencia concuerda con otras sentencias similares en Ecuador, Argentina y recientemente en Chile”, indicó Polo.

domingo, 11 de octubre de 2009

BROTES VERDES

Estimados lectores,
Querría saber si para los revolucionarios pertencer a Europa también significa respetar lo que aquí se dice.
El proyecto de unidad europea es, en líneas generales, un atentado contra la legítima soberanía de los Estados (sobre esto hablaremos próximamente), pero es lo que tenemos, así que por lo menos, aprovechémosla para bien, tal y como se desprende de esta noticia.
Reclama a los estados miembros que respeten la decisión de las escuelas que apuestan por este modelo

El Parlamento Europeo respalda la educación diferenciada por sexosLa polémica sobre la educación diferenciada se ha trasladado a Europa. La UE prepara un estudio para noviembre.

24 Abril 09 - Jorge Valero
-En pleno proceso en el que la educación a niños y a niñas en aulas separadas se ve amenazada en Cantabria y en Asturias (en Galicia el proceso ha quedado en el aire por el reciente cambio de Gobierno), Europa ha dado un espaldarazo a la también llamada educación diferenciada en su último informe sobre educación. Para el Parlamento Europeo, un principio está claro: los estados miembros deben respetar la decisión de las escuelas que quieran diferenciar a los alumnos por sexos.
En un informe aprobado el 1 de abril, la Eurocámara indica que las diferencias de trato en la admisión de alumnos a centros educativos confesionales o basados en ciertas convicciones estarán permitidas «para preservar el carácter y la ética específicos de tales centros y la pluralidad de centros educativos», precisa.
Los eurodiputados recordaron que esta diferenciación no debe dar lugar a la denegación del derecho a la educación ni tampoco se puede utilizar este derecho para justificar discriminaciones por otros motivos.
Tal es la complejidad del debate, y la necesidad de contar con una base empírica fiable para evaluar las ventajas o desventajas de este sistema, que la UE prepara un estudio sobre la educación diferenciada. Se prevé su presentación el próximo noviembre, durante la celebración de una conferencia sobre el asunto.
Suecia, que ostentará la presidencia de la Unión el próximo semestre, encargó a Eurydice, el observatorio europeo de la educación, un estudio sobre el impacto de los géneros en la educación, en el que una de las dos partes se centrará en la educación diferenciada por sexos.
Según explica la responsable del trabajo, Bernadette Forsthuber, el motivo de este estudio es «la preocupación de que las chicas obtienen mejores resultados que los varones, sobre todo en lectura, matemáticas y ciencia». Por esta razón, el trabajo intentará averiguar el impacto del sexo en los resultados. Euridyce ha pedido a los estados miembros que indiquen qué porcentaje del sistema educativo nacional está dedicado a la educación diferenciada, si existen centros públicos que diferencien por sexos y si se cuenta con datos estadísticos nacionales relacionados con este esquema de enseñanza.
«A pesar del resurgir de la educación por sexos en EE UU o Reino Unido, el principio general en los países europeos es la enseñanza conjunta», comenta la experta. En su opinión, no se puede decir que un modelo es mejor que otro porque depende del proyecto pedagógico.
Sin ideologías
Por otra parte, el presidente de la Asociación Nacional para la Educación Pública de un Sólo Sexo en Estados Unidos, Leonard Sax, defendió ayer en Madrid en el Foro Nueva Economía el modelo diferenciado que, a su juicio, tiene que alejarse de prejuicios políticos y religiosos.
El experto destacó que hay estudios que demuestran que la progresión profesional de los que fueron a centros privados diferenciados en EE UU «es superior» a los que acudieron a una escuela mixta. Un ejemplo es la anterior secretaria de Estado de los EE UU, Condoleezza Rice.

miércoles, 7 de octubre de 2009

PINCELADAS REVOLUCIONARIAS EN LA RED

Estimados lectores:

Que, mientras se ponen trabas a la financiación pública de la educación religiosa, el cine español subvencionado hace de las suyas en el terreno de la revolución cultural anti-religiosa, es un hecho.

No pasa un año sin que la revolución dé a luz algún producto de este tipo, plagado de falacias. En este caso, y en honor a la verdad, hay que decir que esta película está financiada con capital privado (Tele5), pero el objetivo es el mismo, y si no, vean: se ha conseguido exactamente lo que se pretendía, que es la frase textual que figura en el subtitular.

Financia telecinco, sí, pero se le ha dado pública notoriedad en la 1, La Sexta y Cuatro, para cerrar el círculo de los mass media revolucionarios.


AMENÁBAR PROMOCIONA SU PELÍCULA «ÁGORA»

«Los que había a mi alrededor dijeron al acabar la película: qué hijos de puta son los cristianos»

En el transcurso del programa de Cuatro «El hormiguero», Alejandro Amenábar aseguró que la reacción de quienes vieron terminar su película «Ágora» que se estrena ahora en España fue así de contundente. La misma que puede llevar a la superproducción de 50 millones de euros a la ruina. Ya tiene problemas para distribuirla en EEUU.

«Las personas que había a mi alrededor dijeron al acabar la película: qué hijos de puta son los cristianos». Así de resuelto y sin tapujos respondía el director de cine Alejandro Amenábar el lunes pasado, cuando Pablo Motos, presentador del programa de entretenimiento «El hormiguero» de Cuatro, le interrogó sobre si el argumento de la película iba a provocar animadversión y odio hacia los cristianos.

El oscarizado actor, que ha reconocido su ateismo militante después de ser primero católico y agnóstico en una etapa intermedia, ha escudado esta postura durante la promoción de su película en qu ese trata simplemente de una denuncia de los «fundamentalismos» y que «hay buenos y malos» entre cristianos, judíos o paganos. Según su propia versión, expresada durante el pasado festival de Cannes, la cinta refleja «el momento en el que el cristianismo dejó de ser perseguido para convertirse en perseguidor». Para ilustrarlo, Amenábar construye una ficción con pretensiones de historicidad, en la que la última directora de la Biblioteca de Alejandría, la matemática Hipatia, es asesinada.

Razón y fe
El Observatorio Antidifamación Religiosa(OADIR), ha publicado una carta abierta al director, en la que le reprocha que «ofrece una visión sesgada en interesada entre las ciencias y la Iglesia, entre la razón y la fe», con plena consciencia de que con ello canalizará «cierto odio hacia los cristianos y hacia la Iglesia católica», como ha reconocido en el citado programa de televisión.

Del mismo modo, desde el OADIR se hace hincapié en que «aparte de los pronunciamientos de Papas anteriores (la encíclica Fides et Ratio, por ejemplo) y de grandes teólogos (como santo Tomás de Aquino), el Papa Benedicto XVI se ha pronunciado en gran cantidad de ocasiones en torno a la cuestión de la racionalidad de la fe». En concreto, señala que el Santo Padre ha reiterado que «el cristianismo es una religión netamente racional, anclada en la razón, en el Logos, que es el nombre, no por casualidad, dado a Jesús de Nazaret».

Riesgo de quiebra
En todo caso, la estrategia de promoción parece verse necesitada de un cierto grado de agresividad, ya que el largometraje, que ha tenido una acogida dispar en los festivales en los que la ha presentado, está en un grave riesgo de no ser rentable, debido precisamente a su carácter anticristiano.

Lo que más preocupa en este momento a los productores, es el escaso entusiasmo de los distribuidores de EEUU donde, según la revista Variety, la superproducción carece «de estilo y de pulso emocional» que podría traerle «problemas para su aceptación entre una audiencia masiva, al menos en EEUU», según recoge el Confidencial Digital.

En España, «Ágora» podría recaudar unos 12 millones de euros y, de ahí hasta 50, hay un abismo financiero por salvar.

Fuente: http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=4817

domingo, 4 de octubre de 2009

CONTRARREVOLUCIÓN. ¿SE PUEDE HACER ALGO?

Por Javier de Miguel


Las cosas están mal, bastante mal, para ser sinceros. Lo podemos ver en los periódicos, en la actualidad más palpable. ¿Están en España las cosas peor? Quizá. O quizá no mucho peor que allende. Pero la pregunta clave es: ¿se puede hacer algo? ¿Estamos condenados a sufrir las penurias de un sistema cada vez más totalitario sin poder mover un dedo?.

Hablemos de España. En España, entre siete y nueve millones de españoles acuden con asiduidad a la misa dominical. Entre el 75% y el 90% se considera católico, y los no-creyentes y ateos apenas alcanzan una cuarta parte de la población (los datos varían entre estas cifras según fuentes). Es decir, esto son datos objetivos, no se los inventa nadie. Con esto no quiero decir otra cosa sino que nos encontramos en España, y no en Yemen, Rusia, Suecia o Ruanda.

Segundo punto: en España disponemos de algo así como un régimen democrático. Ya saben por qué digo “algo así”, pero para la reflexión que nos interesa ahora, España puede considerarse un país democrático. Y puede considerarse así porque más de 35 millones de españoles están llamados a las urnas en cada cita electoral. Y lo único que existe contra eso es el pucherazo (hacer votar a difuntos, como tenían por costumbre en la democrática II República, y demás).

Tercer punto: hagamos un sencillo ejercicio de aritmética. De estos 35 millones, tomando una participación promedio del 75%, resultan 26 millones de votantes. De ellos, aproximadamente 21 millones votan a los partidos mayoritarios, aproximadamente 1 millón a partidos de los considerados de “extrema izquierda”, unos 2,5 millones a partidos nacionalistas, y el resto, 1,5 millones, a otros partidos menores. De nuevo, datos públicos y notorios, irrefutables.

Cuarto punto: extrapolemos estos datos a la población definida como católica y que, por lo visto, practica. Seamos conservadores: digamos que hay “sólo” 7 millones, es decir, el rango más bajo del abanico de datos de que se dispone. Y supongamos también que la participación en este colectivo “baje” al 60%, debido a múltiples causas, como el descontento o la existencia de un colectivo de personas mayores que pueda no votar, niños, etc. (cosa que podría ser discutible). En cualquier caso, tendríamos ¡4,2 millones de católicos practicantes! con derecho a voto en cada convocatoria electoral. Y eso sin contar los no-praticantes o no-creyentes que defienden los postulados de los principios no-negociables (otro día hablaremos de ellos).

La pregunta tonta es: ¿qué papel han jugado / juegan esos cuatro millones (antaño fueron más, y en 1977 ni les digo) mientras que, en más de treinta años, se han aprobado divorcios, abortos, matrimonios gays, EpC, LOGSE, etc?. La respuesta, tonta también, es: residual, insignificante, marginal, tangencial. Lo justo para llenar dos minutos de telediario tres veces al año y poner en bandeja los comentarios habituales de los medios afines a la revolución (que son muchos, más de los que se imaginan, y si no, lean El Mundo). Y esto por no hablar de la división interna que existe dentro de la propia masa social que, se supone, nos representa. Y sobre esto último, la revolución lo sabe perfectamente, lo que le permite apuntarse con toda comodidad al napoleónico “Divide y vencerás” (encarnado en el "yo soy católico" del Sr. Blanco).
¿Se han fijado que en Reino Unido, Francia o Alemania, los partidos ganan las elecciones con un 30% de votos? Pues en España no se ganan unas elecciones con menos del 40% de apoyos. ¿Y se dan cuenta de que, mientras en estos países, socialistas, liberales o conservadores pueden perder una cuarta parte de sus apoyos en cuatro años, en España, ninguno de los dos grandes partidos ha bajado del 30% desde 1993? Traducción: España es un país de abonados políticos cuyo sistema ha devenido en un bipartidismo salvaje, un sistema a la búlgara en dos bloques, inducido en gran parte por los votantes y sus recalcitrantes reincidencias electorales.

Lo grave del asunto: los defensores de los principios anti-revolucionarios podemos (y no lo hacemos) llevar las riendas de este país con cuatro millones de votos, tal y como las llevan los partidos nacionalistas con sus dos millones y medio de abonados, corregidos, claro está, por la trampa de la ley electoral pro-centrifuguismo.

No se trata con esto de hacer la edulcorada arenga a la participación que tenemos ocasión de escuchar en cada campaña electoral. De lo que se trata es de desenmascarar una dramática realidad: hay 4 millones de personas con capacidad para inclinar la balanza hacia “el otro lado”. Y es dramática no porque sean pocos (por como hemos hecho el cálculo, se podría defender que son incluso más), sino por la terrorífica ineficiencia en el “uso” de ese brazo político que se traduciría, agrupado en fuerzas políticas con representación, en unos 30 escaños. Justo los que necesita un partido en el gobierno en minoría para probar presupuestos, leyes y todo lo demás. ¿Qué presidente del Gobierno o líder de la oposición no haría cualquier cosa para contar con el apoyo de 30 diputados ajenos?

El político solamente entiende el lenguaje de los sondeos y los escrutinios. Y ya va siendo hora de que le hablemos en su lenguaje. De nada sirve emplear el lenguaje de las manifestaciones, si eso no se traduce en amenaza electoral. Es “llamar perro y echar pan” a las fuerzas políticas dominantes, además de poner en la boca de los ideólogos revolucionarios adjetivos fáciles relacionados con al hipocresía, que no sin razón espetan continuamente al contemplar gozosos las tozudas contradicciones entre palabras y hechos de muchos de quienes defienden una sociedad justa y digna basada en los principios no-negociables.

En definitiva, la masa sociológica cristiana en España es suficientemente amplia como para hacer valer su peso político. Y la acción política directa es el arma más poderosa de que disponemos en nuestra “democracia”, que si es menos democracia es debido a la tibieza de quienes no son capaces de dar una bofetada al bipartidismo, formado por una especie de dúo sacapuntas, y que a los ojos de la mayoría representan, respectivamente “el progresismo” unos, y “el conservadurismo” los otros, cuando los primeros lo único que hacen progresar es la descomposición social de España, y los otros lo único que conservan son las tropelías y atropellos que la izquierda revolucionaria perpetra contra la sociedad.

¿Se puede hacer algo? Evidentemente que sí. De hecho, lo primero que se debe hacer es cambiar la manera como se está haciendo casi todo. No está mal, para empezar. El problema es que ya hemos perdido 30 años, y lo que queda.

Y por supuesto, no esperar que nadie lo haga por nosotros.