miércoles, 7 de octubre de 2009

PINCELADAS REVOLUCIONARIAS EN LA RED

Estimados lectores:

Que, mientras se ponen trabas a la financiación pública de la educación religiosa, el cine español subvencionado hace de las suyas en el terreno de la revolución cultural anti-religiosa, es un hecho.

No pasa un año sin que la revolución dé a luz algún producto de este tipo, plagado de falacias. En este caso, y en honor a la verdad, hay que decir que esta película está financiada con capital privado (Tele5), pero el objetivo es el mismo, y si no, vean: se ha conseguido exactamente lo que se pretendía, que es la frase textual que figura en el subtitular.

Financia telecinco, sí, pero se le ha dado pública notoriedad en la 1, La Sexta y Cuatro, para cerrar el círculo de los mass media revolucionarios.


AMENÁBAR PROMOCIONA SU PELÍCULA «ÁGORA»

«Los que había a mi alrededor dijeron al acabar la película: qué hijos de puta son los cristianos»

En el transcurso del programa de Cuatro «El hormiguero», Alejandro Amenábar aseguró que la reacción de quienes vieron terminar su película «Ágora» que se estrena ahora en España fue así de contundente. La misma que puede llevar a la superproducción de 50 millones de euros a la ruina. Ya tiene problemas para distribuirla en EEUU.

«Las personas que había a mi alrededor dijeron al acabar la película: qué hijos de puta son los cristianos». Así de resuelto y sin tapujos respondía el director de cine Alejandro Amenábar el lunes pasado, cuando Pablo Motos, presentador del programa de entretenimiento «El hormiguero» de Cuatro, le interrogó sobre si el argumento de la película iba a provocar animadversión y odio hacia los cristianos.

El oscarizado actor, que ha reconocido su ateismo militante después de ser primero católico y agnóstico en una etapa intermedia, ha escudado esta postura durante la promoción de su película en qu ese trata simplemente de una denuncia de los «fundamentalismos» y que «hay buenos y malos» entre cristianos, judíos o paganos. Según su propia versión, expresada durante el pasado festival de Cannes, la cinta refleja «el momento en el que el cristianismo dejó de ser perseguido para convertirse en perseguidor». Para ilustrarlo, Amenábar construye una ficción con pretensiones de historicidad, en la que la última directora de la Biblioteca de Alejandría, la matemática Hipatia, es asesinada.

Razón y fe
El Observatorio Antidifamación Religiosa(OADIR), ha publicado una carta abierta al director, en la que le reprocha que «ofrece una visión sesgada en interesada entre las ciencias y la Iglesia, entre la razón y la fe», con plena consciencia de que con ello canalizará «cierto odio hacia los cristianos y hacia la Iglesia católica», como ha reconocido en el citado programa de televisión.

Del mismo modo, desde el OADIR se hace hincapié en que «aparte de los pronunciamientos de Papas anteriores (la encíclica Fides et Ratio, por ejemplo) y de grandes teólogos (como santo Tomás de Aquino), el Papa Benedicto XVI se ha pronunciado en gran cantidad de ocasiones en torno a la cuestión de la racionalidad de la fe». En concreto, señala que el Santo Padre ha reiterado que «el cristianismo es una religión netamente racional, anclada en la razón, en el Logos, que es el nombre, no por casualidad, dado a Jesús de Nazaret».

Riesgo de quiebra
En todo caso, la estrategia de promoción parece verse necesitada de un cierto grado de agresividad, ya que el largometraje, que ha tenido una acogida dispar en los festivales en los que la ha presentado, está en un grave riesgo de no ser rentable, debido precisamente a su carácter anticristiano.

Lo que más preocupa en este momento a los productores, es el escaso entusiasmo de los distribuidores de EEUU donde, según la revista Variety, la superproducción carece «de estilo y de pulso emocional» que podría traerle «problemas para su aceptación entre una audiencia masiva, al menos en EEUU», según recoge el Confidencial Digital.

En España, «Ágora» podría recaudar unos 12 millones de euros y, de ahí hasta 50, hay un abismo financiero por salvar.

Fuente: http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=4817

2 comentarios:

  1. Tu también tratas de crear animadversión hacia Ágora y su director. A fin de cuentas, si la película es, o no, rentable es una cuestión que el tiempo y los millones de paganos y cristianos que paguen por visualizarla nos dirá. Es decir; la rentabilidad de Ágora no está sujeta ni a tu criterio ni a tu clarividencia (ni al mío), afortunadamente para Amenábar.

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  2. Mario Saladich,

    La rentabilidad de la película no me importa lo más mínimo. No estoy haciendo una crítica técnica, estoy censurando el uso de los medios de comunicación para difundir calumnias hacia el cristianismo y los cristianos, y creo que el objetivo se explicita bastante bien en el titular de la noticia.

    Un saludo en el Señor.

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